La boda de mi mejor amigo

Se hace extraño cuando un amigo tuyo se casa, más cuando es el primero y más cuando es un amigo que tienes desde los 3 o 4 años.

Vale, es cierto que cuando pensaba que iría a la primera boda de un amigo, en vez de un familiar, en vez de llevar traje y corbata, iría con una túnica Jedi, pero eso no dejan de ser detalles que hacen más curiosa, si cabe, la sensación de que a mi edad ya haya gente que no espera su futuro, porque su futuro ya está ahí.

Viejos conocidos y algún amigo que ya están casados, tienen hijos, tienen trabajos de verdad con sueldos de verdad, responsabilidades de gente mayor. Eso hace plantearse algunas cosas, como que si el estar cobrando un sueldo de bromas hasta los 30 me vale la pena. En cambio parece haber gente que con 25 o incluso más siguen pensando que son jóvenes como para llevar una vida de chico mayor.

Y mientras tanto, mi mayor preocupación estos días es decir un discursillo ceremonial que sea divertido y a la vez bonito, digno de la boda de un gran tío y su dentro de poco esposa.